Se celebró en Glasgow, Escocia, la Primer Cumbre Mundial sobre hepatitis, promovida por la Alianza Mundial de Hepatitis y la Organización Mundial de la Salud con el apoyo del gobierno de Escocia. Parte de sus objetivos fue instar a todos los países a establecer los mecanismos necesarios para reducir hasta un 65 por ciento las muertes por Hepatitis B y C en los próximos 15 años, y que causan aproximadamente el 80% de fallecimientos por cáncer de hígado.
Alrededor de 400 millones de personas viven actualmente con la hepatitis viral y la enfermedad reclama un estimado de 1,45 millones de vidas cada año, por lo que es una de las principales causas mundiales de muerte, pero la mayoría de las personas que viven con hepatitis viral crónica no son conscientes de su infección.
La cumbre, co-patrocinado por la OMS y la World Hepatitis Alliance, es la primera reunión mundial de alto nivel para centrarse específicamente en la hepatitis, que reunió a delegados de ONG´s y gobiernos de más de 60 países. El objetivo es ayudar a los países mejorar la acción para prevenir la infección de la hepatitis viral y garantizar que las personas que están infectadas se diagnostican y se les ofrece tratamiento.
Asimismo, se centró la atención en un enfoque de salud pública para esta patología y ser un foro central para que los países compartan sus experiencias y mejores prácticas para impulsar rápidos avances en las respuestas nacionales.
En el marco de esta reunión, la OMS realizó el lanzamiento de un nuevo manual para el desarrollo y la evaluación de los planes nacionales de hepatitis virales . Los formuladores de políticas y otros actores clave en la reunión también discutieron el proyecto de Estrategia Global del Sector Salud de la OMS sobre la hepatitis viral, que establece objetivos para 2030. Los objetivos incluyen una reducción del 90% de los nuevos casos de hepatitis crónica B y C, una reducción del 65% en la hepatitis B y C muertes, y el tratamiento de 80% de las personas elegibles con hepatitis B crónica y las infecciones C.
Un número creciente de países están tomando medidas para hacer frente a la hepatitis viral, sin embargo, poner en marcha una respuesta bien financiado y global es un reto para muchos gobiernos que tienen una alta carga de enfermedades relacionadas con esta patología. En el África subsahariana y Asia del Este entre el 5-10% de la población está infectada crónicamente con hepatitis B. Las altas tasas de infecciones crónicas también se encuentran en la Amazonia y las regiones del sur de Europa oriental y central. La hepatitis C se encuentra en todo el mundo. Las tasas de infección son altos en África y en Asia central y oriental, y aproximadamente dos tercios de las personas que se inyectan drogas están infectados con la hepatitis C.
Argentina es uno de los pocos países en América del Sur que cuenta con un Programa Integral para el control de las hepatitis desde el año 2012, sin embargo este programa aún no alcanza para diagnosticar a la mayoría de las personas que pueden tener hepatitis B o C y no saberlo y tampoco puede resolver aún el acceso a los nuevos tratamientos más eficaces para hepatitis C. Consideramos que si nuestros representantes del Ministerio hubieran asisitido a la Cumbre , podrían haber aportado hacia otros países la buena experiencia para combatir la hepatitis A y también enriquecerse con otras experiencias que ya han resuelto como aumentar el diagnóstico temprano y el acceso a nuevos tratamientos para controlar la hepatitis C.
Adaptación : Hepatitis 2000
Fuente: Medicos y pacientes Nota completa